Por: Melaníe Cotoc
El lunes 16 de marzo, visitamos la Sexta Avenida, zona 1 capitalina, para comprobar el cumplimiento por parte de la población de las órdenes dadas por el presidente Alejandro Giammattei, de evitar aglomeraciones luego de que suspendiera el sábado 14, todas las actividades públicas por la aparición del primer caso positivo de COVID-19 en el país.
Aún con la recomendación de no reunirse en grupos de más de 100 personas, los comercios abrieron y la afluencia de transeúntes fue la habitual, fueron pocas las personas que usaban mascarilla. Fue evidente la baja carga vehicular en diferentes partes de la ciudad, lo que disminuyó el tráfico.
Situación similar se reportó el domingo 15, donde muchos guatemaltecos asistieron al Puerto San José y otros centros recreativos, a pesar de que el presidente suspendió cualquier actividad multitudinaria, así como la Semana Santa, ferias patronales y eventos deportivos. Por la tarde, miembros de la Policía Nacional Civil y el Ejército desalojaron el puerto.
Ese mismo día se registró la primera víctima mortal del COVID-19, un hombre que estuvo de viaje por España y retronó al país el 6 de marzo, no mostró síntomas hasta el 12 de marzo cuando se presentó a realizarse el examen, resultando positivo. A raíz de esa situación, se implementó más medidas como que las personas de tercera edad deben trabajar desde su casa, evitar visitar asilos y evitar las concurrencias.
Otras medidas de contención implementas:
Cierre de las fronteras por 15 días
Inicio de preparación del Parque de la Industria para el uso de atención de casos de coronavirus con la capacidad de recibir a 3 mil personas
Suspensión de labores en el sector público y privado, con algunas excepciones
Suspensión del transporte público urbano y extraurbano
Cierre de los centros comerciales
No reuniones en bares y discotecas
Prohibida la venta y el consumo de bebidas alcohólicas a partir de las 18:00 horas hasta las 6:00 de la mañana
Edición: Ana Véjar
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