Por: Vívian Chile
Con la suspensión de clases por la pandemia del covid-19, también se interrumpió la alimentación escolar. Un beneficio de 2.5 millones de estudiantes de preprimaria y primaria del sector público dejaron de recibir desde el pasado 16 de marzo, una bolsa de víveres que El Ministerio de Educación (Mineduc) dispuso entregar directamente a los padres de familia, por cada niño, se entregará Q60.00 el equivalente a 15 días refacción, en productos que llenan los requerimientos nutricionales para que los elaboren en sus casas.
Si la familia tiene dos o tres niños en el centro educativo, se entregará ese mismo número de raciones a la familia”, señaló la ministra de Educación. Esta normativa seguirá mientras dure la cuarentena por la emergencia del covid-19. Los menús que están distribuyendo, incluyen: frijoles negros, arroz blanco, aceite, harina de maíz, azúcar, pasta y harina de trigo fortificada. Estos son entregados a los padres de familia para que ellos los cocinen en casa.
Ya existe un monto previo que tienen en sus cuentas bancarias las organizaciones que deben adquirir alimentos perecederos para cubrir 15 días de refacción. Son Q4.00 diarios lo que se tienen previsto por niño. Padres de estudiantes de escuelas, recibieron la ayuda, quienes durante la entrega atendieron las medidas de prevención por el covid19. Tales como guardar un metro de distancia entre las personas, presentarse con mascarilla, guantes, y en grupos menores de 10 persones y en diferentes horarios.
“Siempre debemos mantener certeza y fe, que gracias al señor presidente y al nuevo gobierno, por el cumplimiento de los derechos de los niños, nos dio un pequeño suspiro, por su ayuda, porque muchos no tenemos la economía para abastecer una semana o tres días nuestra canasta básica y tenemos más familia”, declaró Marta Gonzales, madre de familia que recibió el beneficio. Además, Ruiz agregó que cuentan con un equipo de nutricionistas para asesorar sobre los productos adecuados para alimentar a los niños de primaria y preprimaria.
Edición: Magda Gil
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